DIVERSOS
70. TERTULIA POÉTICA GUADALAJARA mayo de 2015
Lápiz graso sobre
fotocopia manipulada. J.L. Gómez Recio
¿Qué
futuro nos aguarda? Vamos
a ser espectadores de un tiempo nuevo de pactos y coaliciones. El sistema empieza
de nuevo a avanzar lentamente a paso de mamut triscando la poca yerba fresca
que han dejado, antes de que esta se conserve en el permafrost que llegará el
próximo invierno.
Gracias Dios, en nuestra pequeña república de
las letras todo lo tenemos más fácil. Alejados de presidencialismos y
compromisos de programa, nuestro proyecto de cultura avanza a golpes de
saltacharquillos disfrutando de la creación de nuestra tertulia que, cada vez
más, engorda ajena al panorama. JLGR
ÁNGEL GONZÁLEZ (Poeta y poema sugeridos por Lola Alarcón)
En serio
¿Qué te dimos en vida?
Te llamábamos
a veces por tu nombre
para decirte lo que nos dolía,
para pedirte cosas,
para quejarnos
del frío.
-como si fueses responsable del invierno-
o para preguntarte, suspicaces,
en dónde habías guardado esto o lo otro.
Pero
¿qué te dimos realmente?
¿Qué hubiéramos podido haberte dado
a ti, que no pedías,
que parecías no necesitar nada
más que estuviéramos allí, llamándote
a veces por tu nombre,
para pedirte siempre:
-
danos,
danos?
Acaso amor,
esa palabra impronunciable, impura.
Porque lo extraño es que tal vez te amábamos.
Pienso que te amábamos.
¡Ah, sí, cómo te amábamos!
Presenciamos inmóviles tu vida
y ahora, frente a tu muerte,
se nos vienen de pronto todas esas palabras
que no escucharás nunca.
Madre. Jorge Mato.
JORGE MATO
Paisaje con pájaro
Una casa pequeña,
una pared,
un árbol
y su sombra.
El hermoso manzano
lluvia de puntos verdes
brillando entre las hojas.
Un trinar armonioso
surgiendo entre el ramaje,
sonora melodía
del ave misteriosa
encaramada, alegre,
en lo más alto.
La tarde que declina
y la vuelta al hogar,
a la cálida casa que me espera.
Una mesa cuadrada,
un mantel blanco
y la cena frugal
como episodio último del día.
Todavía resuena en mis oídos
el canto virginal del pájaro en la rama.
No dudo ni un momento
que me habrá perdonado.
Pero era él
la única esperanza de mi cena.
Mesa puesta. Jorge Mato
Ilustración de Andrés Casciani
ALBERTO VALERO
Soneto a un poeta mayor
A
Jorge Luis Borges
Visiones que los ojos de otros muchos
dejaron sobre libros, sus canciones
leídas y aprendidas cual lecciones
que toda biblioteca da a los duchos.
Las pudo así grabar en su memoria,
haciendo de neuronas sus cajones,
cuando fueron sus ojos dos carbones
hizo de sus fantasmas su visoria.
Sacando los recuerdos en serones
mezclados con las musas pare el ciego
cargado de talento y de sosiego
Nos lega de su mundo y sus temores
luces y espejos, citas, profecías
obras magnas, historias de sus días.
JAVIER DELGADO
El anaquel vacío
Alguna vez te pienso en la lejana sala penumbrosa
de la infancia: Herencia de sombras sin alacena, anaquel vacío en tus gafas,
con la excepción posible de una lágrima al abrigo del espanto.
Aquella paz soleada de miedos.
Inaprensible mañana de domingo heno de pravia,
traje corto y orladas casullas oferentes de espaldas y geometrías tonsuradas.
Nada apenas, irremisiblemente nada.
Un formal vacío.
Y no obstante, aquella luminosa certeza de
salvación: Mi nombre en tus labios, invitándome al viaje.
El mismo viaje que aún me lleva, tan lejos ya de
ti.
Portada de San Nicolás . Acuarela de Javier Delgado.
CARLOS BERNAL
No
solo la palabra espera
No solo la palabra
espera
aguarda a quien piensa en ella
y desespera cuando no
son escuchadas
a los que pueden
hablar.
¿Qué es la palabra?
Palabras, palabras,
palabras…,
¿Son imágenes
auditivas?
¿Un jardín y el sonar
de sus plantas?
¿Signos que pregonamos?
¿La mariposa que vuela
de flor en flor trasportando el polen?
¿Expresiones que comprendamos?
¿El poder de la magia?
Palabras… a,b,c…z
Anhelos, quimeras,
tropiezos,
Boletín de noticias.
¿Zeta o ceda?
¿Qué es la palabra?
¿Dejamos al azar su
juego?
El tiempo solitario, continúa
hablando.
La luna se desliza
hasta los brazos del sol
y los dos se mecen con
un profundo amor.
Juego tipográfico al
estilo dadaísta
JOSÉ LUIS GÓMEZ RECIO
No quiero morirme
sin volver a dar mi
primer beso.. JLGR
Coplas en el crepúsculo
Dedicadas a Pablo Llorente
Ay, qué bueno fuera
equivocarme una vez,
ver Salida en Llegada.
No morir y nacer.
Ay, qué bonito sería
poder volver a empezar.
Dar el primer beso.
En mis labios llevar tu sal.
VICENTE MORATILLA
Homenaje
a Pessoa frente a su sitio favorito en Lisboa:”A Brasileira” Fotografía A. Chueca
Recordando a Pessoa:
..."no soy quién describo"
..."no soy quién describo"
Finjo también cuando escribo,
mis palabras son reflejos
de mi cristal y tu espejo,
por eso no rías ni sufras
ni sonrías lo que digo,
sobre todo no sonrías,
no pises la raíz de mis palabras
que al aire muestro,
si sientes dolor por mí,
eso agradezco
y si ríes, como a veces siento,
sepas que no era mi raíz desnuda;
que era la tuya,
sepas que miento.
ISABEL
MORIÓN (Poeta
presentada por Isabel Muñoz)
Cuando el dolor es
grito “El agua
del olvido” (2014)
Hoy es día
de llanto en mi reino.
Miguel
Hernández
Perturba la realidad.
Se lleva por delante
todas las esperanzas
dejándome desnuda
en un mundo infernal
donde el hombre está solo
cuando empieza el ocaso.
Fluyen todas las lágrimas
se pisan, se desbordan.
¡Grita el dolor!
Harto de beber tantas
injusticias, callado
una, mil veces, siempre
soterrado el corazón.
Perdidos los apoyos,
sangrantes las heridas,
vivir en desconsuelo
un día y otro día.
Las lágrimas se agitan,
se abren todos los diques
que empaparán la tierra,
si los besos no beben
todas las soledades…
Isabel Morión López. Nacida el 6 de
febrero de 1949 en Labarces, Cantabria.
Pertenece a la tertulia Rascamán de Madrid que tiene fuertes lazos de unión con
el Taller de Posesía Fernando Borlan de Guadalajara.
LOLA
VILLAVERDE
La cinta de asfalto
le atrae como un imán.
No sabe a dónde va
solo corre veloz
hacia la luz del fondo,
saeta dirigida
a una diana incierta.
Hay un peaje que pagar
de rubíes y obsidiana
por la emoción salvaje.
Corazón desbocado,
sentidos alerta,
fijos los ojos en la meta final,
con su luz engañosa.
Corre cada vez más veloz,
la sangre golpea en sus muñecas,
se humedecen las palmas de sus manos,
un júbilo que no tiene razón
le embriaga,
intoxica su vista,
le deslumbra.
No sabe a dónde va,
si la meta es real o un espejismo
si la luz que vislumbra
es principio o final
si es alto el precio.
Siente frenético el tam tam
y la puerta se cierra.
Calle
de Praga. GR
Agenda de trabajo.
Apunte automático. JLGR
Agenda de trabajo. Apunte automático. JLGR
Recuerdo de la rosa
Los huesos nublados querían resistirse.
Tres latidos secaban el esfuerzo.
Y había un cuerpo grande
donde moraban sucesivas adolescencias.
Por las ventanas del verano
ocurrían los cambios. Pero aquella casa
conocía mis límites.
Pregonaba la lenta huida de los años
me asustaba de músicas.
Sólo una rosa alta, sonaba igual.
A salvo de aquel destrozo sin paraguas.
Tan llena de una vida en el instante
de su canto más puro.
Sólo una rosa que me aprendí
hace miles de años.
PABLO LLORENTE
Hombres
sin estrella. (Pateras)
Con
tiempo soleado llegan las pateras.
Vienen del África del
hambre y de la guerra,
al fasto y el acuerdo.
Vienen africanos, heridos de esperanza,
agua y sal en los
cuerpos,
sida y sed en el alma.
Vienen huyendo de penurias y contiendas,
bajo un sol implacable,
a la riqueza y al
deseado trabajo,
a la libertad esperada.
Transidos de agonía, su ánima encogida
Esperan.
En las fotografías,
insensibles miramos su
presencia,
y no pensamos nunca en
un ayer cercano
en que los nuestros
murieron de hambre y
frío
en Anglés y Argelés,
playas francesas;
la fría indiferencia
del país vecino
tras la guerra civil.
Y después de otras cárceles y países
extraños
en un atroz exilio que
no tiene fin.
¡A vosotros africanos!, os esperan
ciudades
de amaneceres fríos,
trabajos a destajo;
teniendo a veces por
casa arcadas y puentes,
o abarrotados pisos.
En el invierno frío,
el campo descansa y la
brega espera.
De nuevo hambre y
miseria.
Bastantes de los vuestros. Mueren en la
mar.
Naufragan las frágiles
barcas,
ahogados , llegan sus
cuerpos a las playas.
Su descanso,
asciende por el aire,
baja por el agua, para
fundirse con vientos alisios
en los mares del sur.
En nuestras mentes, clavado el recuerdo,
nos remuerde sin
tregua.
Con tiempo soleado,
hombres sin estrella,
pacíficos humanos en pateras,
quieren sobrevivir.
Con tiempo soleado llegan las pateras.
Costas deseadas. Aguada montaje JLGR
PABLO DE CÉSPEDES (Humanista rescatado del olvido para nosotros por Vicente Moratilla)
El
poema de la pintura (fragmentos)
Adulta edad, de mas perfeto estado:
un junco, que tendrá ligero y firme
entre dos dedos la siniestra mano,
dó el pulso incierto en el pintar se
afirme,
De versos y eruditos escritores
a los hombres y mármoles la muerte:
llega el fin postrimero, y el olvido
cubre en oscuro seno quanto ha sido.
humo envuelto en las nieblas, sombra
vana
somos, que aun no bien vista desaparece:
breve suma de números que allana
la Parca, quando multiplica y crece
tirana suerte en condición humana
que con nuestros despojos enriquece.
Deuda cierta nacemos y tributo
al gran tesoro D´el hambriento Pluto.
todo se anega en el Estígio lago:
oro esquivo, nobleza, ilustres hechos…
¿Quantas obras la tierra avara esconde,
que ya ceniza y polvo las contemplo?
¿Dónde el bronce labrado y oro?
¿Y donde Atrios y gradas d´el asirio
templo,
al qual de otro gran rey nunca responde
de alta memoria peregrino exemplo?
Este poema fue publicado por primera vez en 1649 incluido
en el Arte de la Pintura de Francisco Pacheco
Obra destinada a la Catedral de Sevilla
Pablo de Céspedes nació en
Alcolea de Torote Guadalajara(hoy un despoblado), hacia 1538 y murió en Córdoba
en 1608.
Humanista, teórico del arte, pintor, escultor, arquitecto y
poeta formado en la Universidad de Alcalá de Henares y posteriormente en Roma
ciudad en la que vivió siete años convirtiéndose en uno de los primeros
artistas españoles que llevaron las formas e ideas del Renacimiento italiano a
España. Pero fue en el campo de la poesía donde alcanzó Céspedes mayor
celebridad con su Poema de la Pintura o Arte de la Pintura, obra perdida en
parte al conservarse tan solo algunos fragmentos de la misma en 1649 por el
también pintor y escritor Francisco Pacheco del Río. Este poema, escrito en
octavas reales, es un auténtico tratado sobre las técnicas de la pintura tal
como se conocían en el siglo XVI, y supone además una notable composición que
ha llegado a ser comparada con la Geórgicas de Virgilio.
No se tiene noticia de la supervivencia de esculturas o
proyectos arquitectónicos ni de algunas de las obras pictóricas que realizó en
Italia. Afortunadamente, se conservan los frescos que pintó en la iglesia de
Santa Trinidad de los Montes de Roma.
©
Tertulia Literaria, Asociación Cultural C/ Lope de Haro, 4 1º - Guadalajara
CIF
619302231
Esta
publicación aparece gracias a Aache Ediciones, Casino Principal, Dublin House,
Ecoaventura,
Animación, Turismo, Ocio y Tiempo Libre
y
Amigos del Archivo Histórico Provincial de Guadalajara
di-versos-guada.blogspot.com
Números
atrasados
COPIPLUS, Condesa de la Vega del Pozo, 3.
Guadalajara.
No hay comentarios:
Publicar un comentario