DIVERSOS
73. TERTULIA POÉTICA GUADALAJARA junio de 2015
LOS TRES PELIGROS DE
UNA TERTULIA POÉTICA
La
religión, la política y el fútbol…Hoy vamos a hacer hincapié en el noble arte
de las patadas.
¡Gracias
a Dios que ha acabado la Liga, La Copa y la Champions! Ya podemos tirarnos de cabeza a la creación de
arquitecturas imposibles con la lengua; y de amores por inventar. Bendito sea
el verano que llega con su explosión de sensualidad para alejarnos de los
graderíos y las pasiones por unas camisetas y unos colores que nos atocinan
hasta niveles inaceptables. ¿Os imagináis a Don Pelayo iniciando la Reconquista
con la camiseta del Oviedo Club de Fútbol, dando mandobles con bengalas
encendidas a un Abderramán tocado de los colores del Marraquech FC…? Pues eso.
Que no nos toquen más la vuvuzela. JLGR
AMPARO NAVARRO
Pido al cielo que me abra la puerta
del cuarto
de un ángel poeta, que se encuentre
dormido
y poderle robar un verso.
Que mi palabra se haga frase, que mi
frase se haga oración y esa bendita oración se haga texto.
Que mis manos encuentren la tinta precisa para
seguir.
La
transmutación de un ángel dormido. Vieja estampa.
VICENTE
MORATILLA
Tiempo
muerto
Una vez te soñé
sin respuesta,
perdimos el momento exacto
y sé que fue aquel,
que no vivimos,
el único verdadero.
Consuelo
de madre
Consuelo de madre
a la palabra del llanto,
en la mano que acaricia.
compasiva, y en las dos de un te
quiero
que quisiéramos eterno.
Dónde encontrar una sola
que cierre el verso,
quién tiene la palabra
para el último segundo.
JOSE
LUIS GÓMEZ RECIO
Si el destino y el azar
-del que yo ahora no dispongo-
te llevara a deambular
por las librerías de viejo
de la zona alta de Ginebra,
puede que la encuentres.
Es la única mujer que lleva
siempre el warning encendido,
porque tiene luz interior;
es de otro planeta…
Pobre apagado de mí, que sueño
que ella también me busca.
Sin que se asuste, pregunta
si alguna vez volará al sur.
Dile que he puesto redes
de estorninos en mi jardín
y almohadones de seda
y axilas para su acomodo.
Cerca de Les Armures
bajo la señal del Camino
ayúdala a alzar el vuelo.
Cuesta abajo es más fácil:
tic-tic-tic, luces de posición.
Despega.
La espero mientras muero.
Vieja
Ginebra. Tiendas de antigüedades. Foto Oficina de Turismo suizo.
CARLOS
BERNAL
¿Qué es el pasado en cualquier caso?
No tengo nada que divulgar
ni aclarar, si todo está dicho,
si con ella mis recuerdos
y mi vida dejé.
¿Qué espero para confiarlo
ofrecerlo, aislarlo?
¿Qué acomodo tendré?
si asentarme quiero en mis recuerdos ?
¿Qué es el pasado en cualquier caso?
No es fácil dilucidar que es el ayer,
es como tirar al suelo y destruirlo
esconderlo en lo más recóndito del cerebro.
Nuestros recuerdos son rechazados,
en el reloj del tiempo
¿Qué es el pasado al fin y al cabo?
JAVIER DELGADO
Adelfas (cumpleaños)
En esta hora me asiste,
Montaje fotográfico Javier Delgado
|
larga ya en años,
la inasible belleza
de junio en sus mañanas,
su espléndida, generosa
convocatoria de luz.
A veces, mis doradas adelfas,
o su nébula sanguínea o
su constelada bruma
de copos blancos y perfume,
las adelfas, entrada y salida
de primaveras,
nuevo ciclo abierto en sazón,
entretiempo nuevo.
Ese esplendor aún
y uno más
sempiterno vaivén
entorno a nada,
único arte natural y éxito
del inacabamiento,
esta inagotable primavera.
Tiempo ignorante
por inconsciencia del término,
tiempo otro para ti, sin vuelta,
mientras la áspera certeza
de un final cierto y a plazo.
PABLO LLORENTE
Tus veinte abriles locos
¡Chica! Sigo los guiños del vaivén
de tus nalgas,
las señales que envía tu cuerpo en
movimiento.
Persigo la vereda de esa marcha divina,
la huella en la retina que rompe
hasta el silencio,
tus locos veinte años, tus veinte
abriles locos,
perfume de mi ensueño, la flor de tu
misterio.
Mística en tu piel desnuda
Tus senos alumbran el mundo.
El azul de tu ojo tiñe de cielo, el
suelo.
Rizos bermejos por melena,
menuda boca, rostro alegre,
posas cual náyade un lánguido
ensueño.
Hay mística en tu piel desnuda.
Mi pupila,
acaricia tu aura brillante.
Comulgo con la gracia de tu estilo.
GARCILASO DE LA VEGA (Poeta que viene de la mano de Lola
Alarcón desarrollando el tópico del “locus amoenu”)
Égloga III
(…)
Cerca del Tajo, en soledad amena,
de verdes sauces hay una espesura
toda de hiedra revestida y llena,
que por el tronco va hasta el altura
y así la teje arriba y encadena
que el sol no halla paso a la
verdura;
el agua baña el prado con sonido
alegrando la vista y el oído.
Con tanta mansedumbre el cristalino
Tajo en aquella parte caminaba,
que pudieran los ojos el camino
determinar apenas que llevaba.
Peinando sus cabellos de oro fino,
una ninfa del agua do moraba
la cabeza sacó y el prado ameno
vido de flores y de sombras lleno.
Moviola el sitio umbroso, el manso
viento,
el suave olor de aquel florido
suelo;
las aves en el fresco apartamiento
vio descansar el trabajoso vuelo;
secaba entonces el terreno aliento
el sol, subido en la mitad del
cielo;
en el silencio sólo se escuchaba
un susurro de abejas que sonaba.
(…)
Cascadas del rio Cifuentes en su desembocadura con el Tajo en Trillo,
Guadalajara.
LOLA VILLAVERDE
El pasado subvierte las reglas,
y quiere ser presente,
imponer las pautas
de otro tiempo.
y quiere ser presente,
imponer las pautas
de otro tiempo.
Llega adherido a la añoranza
de días que fueron y no son,
de vivencias que son
ya solo sombras.
¿Por qué sufrir
por lo que ya no existe?
No reconozco ya las voces
ni los rostros.
No quiero recordar,
cierro el postigo
ÁLVARO CUNQUEIRO (Poeta, dramaturgo y novelista recomendado vívamente
por Jorge Mato)
Yo soy Danae
Yo soy Dánae. Desnuda caía en el lecho come
bianca neve scende senza vento.
Y llegó secreto con el fulgor
convertido en monedas de oro que cayeron
sobre mí, alrededor, en el suelo
Díjose a sí mismo una voz y aquel oro de ceca
se arremolinó en un amén y se hizo el varón.
Me encontró virgen, me surcó y me sembró.
Me bebió, como quien se echa con sed sobre un río.
Pero lo pasado pasado está.
Ahora soy vieja, y en un reino de columnas derrumbadas
voy y vengo por entre los cipreses y las palomas.
Me tienen por loca, y piensan que miento
cuando digo que fui desvirgada por Zeus.
Para burlarse de mí baten una moneda en el mármol
y yo pienso que él vuelve, y me quito la ropa
y me dejo caer desnuda en la hierba come
bianca neve scende senza vento.
Ni escucho sus risas. Ya soy vieja
pero nunca pude salir de aquel sueño de antaño.
Yo soy Dánae. Desnuda caía en el lecho come
bianca neve scende senza vento.
Y llegó secreto con el fulgor
convertido en monedas de oro que cayeron
sobre mí, alrededor, en el suelo
Díjose a sí mismo una voz y aquel oro de ceca
se arremolinó en un amén y se hizo el varón.
Me encontró virgen, me surcó y me sembró.
Me bebió, como quien se echa con sed sobre un río.
Pero lo pasado pasado está.
Ahora soy vieja, y en un reino de columnas derrumbadas
voy y vengo por entre los cipreses y las palomas.
Me tienen por loca, y piensan que miento
cuando digo que fui desvirgada por Zeus.
Para burlarse de mí baten una moneda en el mármol
y yo pienso que él vuelve, y me quito la ropa
y me dejo caer desnuda en la hierba come
bianca neve scende senza vento.
Ni escucho sus risas. Ya soy vieja
pero nunca pude salir de aquel sueño de antaño.
(De
“Herba aquí ou acolá”)
Älvaro Cunqueiro. Nació en
Mondoñedo, Galicia, en 1911.Completó su bachillerato en Lugo y en 1934 terminó
sus estudios de Filosofía y Letras en la Universidad de Santiago de Compostela.
Publicó su primer libro de poemas, «Mar ao Norde» -Mar al norte-, en 1932, seguido por «Poemas do sí e non -Poemas de sí y de no- en 1933, «Dona do corpo delgado -Muchacha de cuerpo delicado- en 1950, «Cantiga nova que se chama Ribeira» -Cantiga nueva que se llama Ribeira- en 1933, y «Herba aquí ou acolá» -Hierba aquí o allá- en 1980.
Obtuvo el Premio Nacional dela
Crítica por «Sochantre» en 1959 y por «Os outros feirantes»
en 1979, el Premio Conde de Godó de Periodismo en 1966, y el Premio Nadal en
1969 por «Un hombre que se parecía a Orestes».
Además fue nombrado, entre otros reconocimientos oficiales, Doctor Honoris Causa porla Universidad
de Santiago en 1980.
Su magnífico discurso de ingreso enla Real Academia Gallega, leído en Mondoñedo en
1964, «Tesouros novos e vellos» se ha convertido en una pieza clásica de la
literatura gallega contemporánea.
Murió en Vigo, en 1981.
Publicó su primer libro de poemas, «Mar ao Norde» -Mar al norte-, en 1932, seguido por «Poemas do sí e non -Poemas de sí y de no- en 1933, «Dona do corpo delgado -Muchacha de cuerpo delicado- en 1950, «Cantiga nova que se chama Ribeira» -Cantiga nueva que se llama Ribeira- en 1933, y «Herba aquí ou acolá» -Hierba aquí o allá- en 1980.
Obtuvo el Premio Nacional de
Además fue nombrado, entre otros reconocimientos oficiales, Doctor Honoris Causa por
Su magnífico discurso de ingreso en
Murió en Vigo, en 1981.
ALBERTO VALERO
El hombre que regañaba al mundo
Un hombre enfadado camina solo
por la gris acera, para el dormida,
con gestos impersonales, señala
a todos y a nadie, gritando al
viento
con la voz hastiada, iracunda y
seria,
parece reprender actos supuestos,
inconclusos en su mente perdida,
con palabras secas, fuertes,
rocosas,
entre frases falaces e
incongruentes.
Se muestra al decirlas, muy
convencido
y en su ilusión de fuera lo que
fuere,
a él le duele que nadie le
comprenda.
A su paso la gente que le mira
se aparta rauda, con prisas y miedo,
temerosos, les asusta esa rabia
que parece explotar en cada gesto,
le abren paso, ponen distancia y
cuando
se aleja, encogen lo hombros con
cinismo,
quitando importancia al paso del
loco,
se vuelven, ven con desprecio y
asombro,
mientras que algún lerdo se ríe y
bromea.
Entre tanto el cuerdo o el poeta
piensa
¿Qué dañó al hombre, fuera de su
culpa?
¿Qué le hizo su vida o lo que fuera
eso?
JORGE MATO
Mariposas
Mariposas azules sobre la negra boca
del cañón.
Psicopompos* del alma
de los niños que duermen
bajo escombros de polvo y de
estulticia.
Alas ingrávidas de todos los colores
trazan sin pausa caminos imposibles
entre las explosiones y los llantos.
Las mariposas muertas de los niños
saben que todo esto es solo un juego
que antes no conocían.
Y sonríen.
Ilustración Jorge Mato
*En el número 72 se explica qué es un psicopompo.
JOSÉ LUIS PUERTO HERNÁNDEZ (Poeta recomendado por Manuel Sanz)
José Luis Puerto Hernández. Nació en la
Alberca 1953. Estudió Filología Románica en
la Universidad de Salamanca. Fue
secretario del poeta Rafael Alberti en los cursos de verano de El Escorial . Actualmente desempeña
la docencia como Catedrático de Lengua y Literatura en un instituto de
enseñanza secundaria de León. Ha participado como
conferenciante o como recitador de su obra en importantes instituciones, como
los cursos de verano de El Escorial o el Círculo de Bellas Artes de
Madrid.
Colabora con frecuencia en revistas y
publicaciones literarias con trabajos de creación y críticos sobre San Juan de la Cruz, Fray Luis de León, Leopoldo Alas "Clarín", María Teresa León, Eugenio de
Nora, José Ángel Valente, Antonio Gamoneda, Antonio
Colinas, José Jiménez Lozano, etc.
Tiempo dormido
Está el tiempo dormido en este
estanque,
La cúpula de alisos lo protege
Y se halla en él tu corazón de niño
Albergado en sus fondos
Como las hojas muertas,
Las hojas de corazones
Que han latido en las ramas,
El corazón cual hoja
Entregado a un latir que es melodía,
Melodía que salva.
¿Y cómo rescatarlo?
¿Y cómo rescatar el tiempo antiguo,
El tiempo de nogales y castaños,
De salmodias y súplicas,
De soportales y prosodias,
De tablas vivas de multiplicar?
(…)
JOSÉ LUIS GÓMEZ RECIO
Héroes heterodoxos infantiles
Nunca entenderé cómo un adulto puede llegar a
convertirse en dentista, golfo de “coge el dinero y corre”, antipodista de
circo o concejal de basura - por citar algunos casos concretos - si todos hemos
sido los mismos parvulitos cabezones, descamisados, desollados por las
mataduras de los recreos y perdedores de dientes prematuros.
Todos empezamos en un magma muy parecido y
acabamos en diferentes destinos. Para mi es algo increíble que intentaré
desentrañar si sois capaces de seguir leyendo.
En la turbia olla de presión que tengo por
cabeza, bullen algunos de los principales escalones que nos llevan a esa
tremenda selección tan dispar en la que acabamos inexorablemente.
Así, de manera torpe, voy a intentar destripar
lo que, para mí, es la principal causa de nuestra personal metamorfosis: Los
héroes heterodoxos que en nuestra infancia nos dieron ejemplos de la dirección
del camino a seguir. Los que nos moldearon inconscientemente para el futuro.
Allí estaban, a nuestro alrededor, inyectándonos la energía necesaria para
transformarnos de niñatos de mierda en adultos sorprendentes y distintos. Ale.
Hagamos una distinción principal. Los héroes
ortodoxos que nos proponían en el cole, no nos servían con su glorioso ejemplo
para nada. El mercenario Cid Campeador, la olorosa Isabel la Católica, el Señor
Sant Yago, alanceador de balabalas rifeños, Indibil y Mandonio, que nunca
supimos para que servían, o Viriato el pastor cabreado por las legiones
romanas… Estos y otros parecidos no intervenían para nada en el domeño de
nuestros impulsos vitales. ¿Hay algún listillo que sostenga que es ingeniero de
caminos por el ejemplo que recibió de Pelayo? Pues, no. A eso me refiero.
Sin embargo había muchos héroes infantiles que
trabajaban duro en mejorar los ángulos de nuestras incipientes personalidades.
Unos eran de ficción y otros muy reales.
Intentaré dar un repaso a los que, en mi caso,
me llevaron de ser un oscuro estudiante a un mucho más oscuro pajarraco anidado
en la comarca del río Badiel.
Empezaré por los imaginarios de Guillermo
Brown, Huckleberry Finn, los hijos del Capitán Grant, Snoopy, Mafalda, El
Pequeño Sheriff, Diego Valor, Paco/Pepe/Colás (la Propaganda Popular Católica
que nos llegaba a la salida de la iglesia del pueblo), Juan Centella, Dos
Hombres Buenos, los miembros del Club del Pino Solitario… y docenas de héroes
que pugnan por hacerse un hueco en mis recuerdos.
Pero siempre la realidad hace pequeños a los
personajes de ficción. De aquellos héroes reales de infancia y pubertad,
entresaco a los que me marcaron a fuego.
José Luis Huertas que era la envidia de mi
curso porque era capaz de echar aire por los ojos apretándose las narices y
soplando por ellas hasta que su cabeza se ponía de rojo cereza. La prueba de
que salía aire por los lagrimales, eran sus gafas empañadas que mostraba
triunfante al finalizar el acto.
No menos prodigioso era Canales que se metía
por la nariz un reguñito de hilo. Sostenía firmemente una punta del ovillo y
aspiraba con fuerza y gargajeaba hasta que salía por la boca el resto del hilo.
Luego con los dos extremos en ambas manos los deslizaba hacia delante y detrás
mientras que bizqueaba como una gárgola. Joder, ese sí que era un buen héroe,
no la lista de Agustina de Aragón o el tambor del Bruch tocándonos las narices.
Otro de mis heterodoxos infantiles era mi
hermano Julio que era capaz de llenarse la boca de cagarrutillas de oveja hasta
que se convertía en un hámster humano… ¡Y no se las comía!
No menos interesante era Gonzalo “el mona”
capaz de tirarse de tejados, árboles altísimos y cortadas profundas del río
Badiel al grito de “Dios se tiró y no se mató, yo me tiraré y no me mataré”. El
sortilegio sólo valía para él, Los demás niños éramos mucho más mortales y no
nos atrevíamos a seguir sus enseñanzas. Pero le admirábamos profundamente.
Todavía recuerdo asombrado la capacidad de
seducción de mi héroe colegial, Eduardo Chamorro, que hacía bocadillos de
dentífrico de menta y de betún y los cambiaba por genuinos sándwiches de jamón
York entre los alumnos más pacatos. Pero entre todos, mi maestro favorito fue
Juanito, brujo precoz por la gracieta divina que le hizo caer del cielo una imponente cagada de cigüeña sobre su
cabeza. A él le cambió el carácter para siempre. Y nos lo exportó a todos sus amigos.
Cada uno de nosotros podemos desentrañar de
manera freudiana las razones del porqué coño somos lo que somos, exceptuando a
los que ejercen profesionalmente la política, porque de ellos era el reino de
la niñez más sosa que os podáis imaginar.
Hasta luego, amiguitos.
La savia de muerto se nos inyecta
a golpes de suspensos y
tabacas aumentativas,
mientras el tiempo se maquilla
cuando más dormidos estamos.
Yo nunca hice nada para
llegar hasta aquí. Desconcertado
no reconozco la meta.
Publicado en Guadalajara
2000 25 de agosto de 2008
Ilustración
Norman Rockwell
© Tertulia Literaria, Asociación
Cultural C/ Lope de Haro, 4 1º - Guadalajara
CIF 619302231
Esta publicación aparece gracias
a Aache Ediciones, Casino Principal, Dublin House,
Ecoaventura, Animación, Turismo,
Ocio y Tiempo Libre
y Amigos del Archivo Histórico
Provincial de Guadalajara
di-versos-guada.blogspot.com
Números atrasados
COPIPLUS, Condesa de la Vega del Pozo, 3.
Guadalajara.
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