DIVERSOS
21. TERTULIA POÉTICA DEL CAFÉ LICEO GUADALAJARA julio 2014
¿Dónde emigran los
poetas en verano? Ya nos gustaría que se dirigieran a su Itaca de las ideas
nuevas. Pero mucho nos tememos que se dirigen cansinos a su encuentro anual con
las cremas de protección solar y los escaparates de lorzas, granos y venas
varicosas. Esos, los que han elegido regresar a la papilla marina primigenia.
Los que se han decidido por regresar a los pueblos de origen, se encuentran con
los corrales, los tapiales y las avispan que pican a los bardos como a
cualquier hijo de vecino.
Algunos
de nosotros hemos decidido por quemar los carnets de nómada y hacer Tertulia
sestera en Guadalajara.
DANIEL
VÁZQUEZ
Belleza
Buscar a tan
venerable doncella
entre los
velos de la infinitud,
rasgándolos
con certera agudeza
mientras el
alma despliega su luz.
En su pureza,
tímida, se esconde,
habitando tan
elevadas cimas
que
inalcanzables son al ser innoble
condenado a
sufrir fatal caída.
A mí
prométeme tu blanca mano,
permite que
mi espíritu se entregue
al dulce
bálsamo de tu regazo
cuando mi
beso eterno amor te ofrece.
(Uno de los dos poemas que recitó Daniel en la
Tertulia Abierta y que no fue posible incluirlo en el número anterior de
DIVERSOS)
Lilith
Habitas la desolación
cubriendo toda tierra yerma
con tu hálito de perdición,
susurrando dulce canción
que porta melodía enferma.
Cual nítido arroyo es tu piel
manando a través de tus ojos
agradables como la miel,
traicioneros cual siervo infiel
con daga y postrado de hinojos.
Parecen tus cabellos de oro,
mas de las tinieblas proceden
formando con las sombras coro,
lugar donde el nocturno foro
se abre a quienes ante ella ceden.
Juegas en la orilla del mar
prestando tu cuerpo a la bruma
que sus galas te ha de otorgar,
mientras el imperio estelar
ante tu belleza se abruma.
No intentes tus tretas conmigo
y sepárate de mí ahora,
pues Dios habrá de ser testigo
de cómo tu llanto y su abrigo
no
me apartaron de la aurora.
JOSÉ
LUIS GÓMEZ RECIO
Estío implacable
El valle del Badiel
sueña en verano
con ser ría vikinga,
profunda y fría,
volada de vencejos
revoltosos
que quieren ser
cormoranes.
El Henares quiere ser
Amazonas
y la Muela planicie
boliviana.
Espejismos de fiebre
de julio
del párkinson de los
vahos de calima.
Yo, pájaro bobo
perdido en la Alcarria
imagino que me
quieres
y pones tu mano
de levadura
en un bolsillo de mi
camisa mayor.
Ay si pudiera soñar a
mis padres
regresando conmigo a
Heras,
pidiendo perdón por
haberme
abandonado a mi muerte
en vida.
ALBERTO VALERO
El
momento
Luminaria mía, son
los ojos tuyos
de dos luceros
destellos fugaces.
Tu boca, al besar
brilla como la luna,
cálidos labios,
osados y audaces
que crean temblores,
cuando se encienden,
por grietas de amor,
emanando lava,
solidifica, como
corazón.
Tus dedos suaves
rozando mis sienes
levantan la ola, de
impulsos sexuales,
susurro dulce que
cierra mis ojos,
gozo prometido, surge
del cielo
liado en tu pelo,
cubriendo tu cara,
sobre mi pecho deja
su perfume,
hacen complacencia
esa sensación.
Sensuales sentires,
recorren mi ego
nos hacen vibrar
eróticos ritmos,
deleite, calma de las
sensaciones,
sonrisas, gozo, los
ojos en blanco,
ansia, jadeos, pulso
acelerado,
cuando el respirar de
pronto se corta
y al éxtasis… sigue la
relajación.
JAVIER DELGADO
Pulsos de carne
rosada
coronados a negro y
reflejos dorados
muévense o gesticulan
sobre una estrecha
franja
color cobalto oscuro
casi negro.
La brisa viaja
templada
y esplendentes gasas
ascienden
lentamente, colgadas
sobre
un horizonte de luz
y brillo verde
ramillete
en una mano abierta
de arena.
Y además, dobleces
de ámbitos en sombra,
trasparencias
perdidas,
casi cero absoluto!
Y a pesar de todo,
sin pausa,
hay un instante
presentido en que Venus
pudiera nacer de
nuevo,
erguida sobre la espuma.
(ilustración de Javier
Delgado)
CARLOS BERNAL
Negra
noche
Días tristes,
blancos, lleno de pesares,
la muerte me
envuelve,
tan cerca estuve de
ella,
que la muerte nunca
fue tan muerta
y vacía de toda vida.
Solo la muerte me
cubría,
¿creéis que estaba
muerto?
Con rostro abatido
despierto,
una gran bruma me
invade,
recuerdos vanos,
ausencias largas.
Locura de mis penas y
fatigas,
mis ideas vuelan de
mi cabeza,
no puedo desconectar
una con la otra,
es… como volverse
loco,
pero no lo estoy.
Quedo solo en la
mayor soledad.
Un gran silencio
aislado
y los fines empiezan
a surgir
sin distinguir esos
valles y mares
y en las dudas que
nacen.
No estoy solo
no estoy solo
solo no estoy
algo pulula en el
ambiente.
Negra noche
sentimientos negros.
PABLO LLORENTE
Valientes y con desgaire
Heridas por falso
amante
las mujeres en sus
vidas,
heridas por falso
amante;
por el suelo limpia
sangre.
Valientes y con
desgaire,
vaya hombres más
miserables.
Por ser una llaga
ardiente
para siempre
recordadas
por ser una llaga
ardiente;
por ser vidas
arruinadas,
dieron sus cuerpos y
mentes,
en la memoria clavadas.
PAULINO APARICIO
En los lentos
zaguanes
En los lentos zaguanes
no quedan ya colores
cuando se acaba todo,
cuando se va acabando
la piel con arboledas
y la oración de marzo.
En los lentos zaguanes
se han muerto los domingos,
aquellos transparentes
donde se agolpaba la harina
el olor de la iglesia,
como un niño con sueño.
En los lentos zaguanes
se siente la carcoma
de la madera vieja,
pero nada ha cambiado;
sólo se va extinguiendo
la esperanza de luces,
los gusanos que ardían
en la noche de un parque
donde todo era nuevo
y mojado de sueños.
JORGE MATO
Frente al espejo
Este rostro raído que me mira
con la cara de niño
que en otro tiempo
veía con mis ojos.
Esta luz rediviva
que sale de ese rostro del pasado
observa con ternura
todo lo que hoy le ofrece
el espejo traidor.
¿Dónde guardo el abrazo que no
tuve?
Y dónde las palabras que no
dije.
Me mita y me pregunta
con su cara de niño con arrugas.
Pero no es un reproche.
Tan solo una pregunta
que no tiene respuesta.
VICENTE
MORATILLA (Leyendo a León Felipe)
Romero solo
Ser en la vida romero,
romero sólo que cruza siempre por caminos
nuevos.
Ser en la vida romero,
sin más oficio, sin otro nombre y sin pueblo.
Ser en la vida romero, romero..., sólo
romero.
Que no hagan callo las cosas ni en el alma ni
en el cuerpo,
pasar por todo una vez, una vez sólo y
ligero,
ligero, siempre ligero.
Que no se acostumbre el pie a pisar el mismo
suelo,
ni el tablado de la farsa, ni la losa de los
templos
para que nunca recemos
como el sacristán los rezos,
ni como el cómico viejo
digamos los versos.
La mano ociosa es quien tiene más fino
el tacto en los dedos,
decía el príncipe Hamlet, viendo
cómo cavaba una fosa y cantaba al mismo
tiempo
un sepulturero.
No sabiendo los oficios los haremos con
respeto.
Para enterrar a los muertos
como debemos
cualquiera sirve, cualquiera... menos un
sepulturero.
Un día todos sabemos
hacer justicia. Tan bien como el rey hebreo
la hizo Sancho el escudero
y el villano Pedro Crespo.
Que no hagan callo las cosas ni en el alma ni
en el cuerpo.
Pasar por todo una vez, una vez sólo y
ligero,
ligero, siempre ligero.
Sensibles a todo viento
y bajo todos los cielos,
poetas, nunca cantemos
la vida de un mismo pueblo
ni la flor de un solo huerto.
Curiosos nos parecen
estos primeros días de julio. Los Pasos Perdidos hacia el estío no han impedido
que este miércoles fuera tanto o más fructífero que otros.
Desde Asturias, nos
enviaron sus poemas Javier Delgado y Alberto Valero. Gracia Iglesias, también
en Asturias, está desbocada firmando sus libros, enhorabuena, por eso no ha
sacado tiempo para mandarnos algo. Desde su hospital –mejórate amigo- Carlos
Bernal nos facilitó el suyo. Amparo Navarro está absorbiendo Naturaleza en su
Colombia natal. Preludio de buenos poemas, de eso estamos seguros. Manuel Sanz
está invisible dentro de algún libro profundo. Jó, cómo te envidiamos… En fin,
chupemos de la vida y afilemos el lápiz, que solo es un verano.
Estos dos últimos
números de DIVERSOS están marcando la tendencia de nacer con doce páginas. Algo
bueno está pasando y no queremos perderlo.
Y si quieres números
atrasados en formato papel, consíguelos en Discopi, Cuesta del Matadero 17. 19001 Guadalajara.
